El pasado 16 de febrero celebramos la V Convención de TACTIO en Alicante. Dionisio Botella y Ana Pozo hicieron de maestros de ceremonia. En la sesión de mañana, intervinieron los Socios-directores, Mario Monrós y Joaquín Bertrán. Y, tras ellos, nos acompañó Víctor Küppers.
Mario Monrós llevó en esta ocasión el peso de los números, dando cuenta de un gran año para TACTIO en España, en el que crecimos en torno a un 30% en facturación y en horas contratadas, así como cerca de un 20% en el número de convenios. En Francia, después de dos años, ya hemos superado el millón de facturación. También repasó los cambios y refuerzos que se han dado en diferentes áreas de la compañía. Finalmente, anunció que 2018 será un año en el que se prestará especial atención al cliente interno, potenciando y haciendo tangibles los valores que nos caracterizan.
Joaquín Bertrán nos explicó su sueño, que se compone de dos variables. La primera variable es 0% insatisfacción. Y la segunda variable es 100% motivación-fidelización. En un emotivo discurso, puso en valor a las personas que componen TACTIO y, sobre todo, instó al conjunto de la organización a ayudar y a atreverse a protagonizar los cambios que se necesitan para seguir creciendo. Recalcó que este crecimiento ha de ser en base a valores, y de ahí que este año se vaya a potenciar esta materia con diferentes iniciativas que afectarán a todos los departamentos.
Tras Monrós y Bertrán, Víctor Küppers protagonizó una conferencia vibrante, en la que explicó su fórmula para la felicidad e hizo reflexionar al conjunto de la organización.
Tras un rápido lunch, los integrantes de TACTIO nos pusimos cómodos y nos lanzamos al agua. De la mano de un grupo de profesionales del mar, compusimos 13 equipos e hicimos una doble competición: por tiempos y por valores.
Ya por la tarde-noche, comenzó la segunda parte formal de la Convención de TACTIO, en la que se reconoció a diferentes personas de la organización en nueve categorías distintas. Un año más, se cumplieron los objetivos marcados previamente para el encuentro. Y un año más, vivimos un ambiente magnífico.
