La reforma laboral cuaja en Burgos con un 40% más de fijos

Las empresas intensivas en mano de obra -hostelería, comercio, agricultura y limpieza-, encuentran serias dificultades para adaptarse a una normativa que, en el resto de las industrias, ha sido bien aceptada.

Hasta la total entrada en vigor del Real Decreto Ley 32/2021, a principios de abril del presente año, los contratos indefinidos representaban entre un 5% y un 10% sobre el total de la contratación en la provincia. Con los últimos cambios en la reforma laboral, se han elevado hasta el 41% de los contratos firmados en Burgos. El punto de inflexión se produjo en febrero y marzo pasados (antes, incluso, de la entrada en vigor de la norma) y, varios meses después, la mitad de las empresas locales reconoce que se han adaptado al cambio sin problemas; la otra mitad no termina de encajar las nuevas modalidades de contratación en su actividad.

«Una de cal y otra de arena», resume el vicesecretario de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE), Íñigo Llarena, quien reconoce el «gran salto» dado en el mercado laboral local, que alcanzó un histórico 41% de la contratación indefinida en mayo, mes a partir del cual está bajando este porcentaje. «Los contratos por obra y servicio han desaparecido. Si cada vez hay más indefinidos en el mercado, por lógica, cada vez habrá menos contratación».

Las consultas en su despacho de FAE, abundantes en los primeros tiempos de la reforma, se han ido reduciendo en el tiempo. «Al principio, no estaban nada claro las modalidades de contratación, pero hoy apenas hay consultas a este respecto».