El 20% de las empresas aragonesas prevé que en el año 2020 aumente el riesgo derivado de sus deudores. Además, también existe una importante preocupación ante los plazos prolongados de los pagos. El Informe Europeo de Pagos de Intrum pone de manifiesto que casi dos de cada diez empresas aragonesas prevén que aumente el riesgo derivado de sus deudores en el año 2020.
Un dato con el que Aragón se sitúa como la comunidad más pesimista, seguida de Galicia con el 14%, Castilla-La Mancha con el 12% y Murcia con el 12%.
El porcentaje aragonés contrasta con la situación de las empresas vascas que son las más optimistas, puesto que solo el 1% del tejido empresarial de esta autonomía estima que se producirá un aumento del riesgo derivado de sus deudores el próximo año.
Esta percepción de las empresas aragonesas para el año 2020 se asienta sobre la preocupación que tienen como consecuencia de los impagos. El informe refleja que la mayor preocupación de las compañías en Aragón son los plazos de pago prolongados. Una inquietud que apunta el 31%.
Además, las empresas aragonesas también están preocupadas por los pagos tras la fecha de vencimiento. Un problema que es indicado por el 22% de las compañías aunque, en esta ocasión, el porcentaje se sitúa por debajo de la media nacional, que es del 28%.
Y, a pesar que la prevención es la clave para protegerse de impagos, lo cierto es que hoy en día todavía son pocas las empresas aragonesas que adoptan medidas preventivas.
En concreto, el 37% no toma medidas de protección contra impagos. Un porcentaje que es similar a la media española tras haber disminuido desde 2018 el número de organizaciones que no implementaba ninguna medida en ese sentido, situándose el porcentaje en aquel ejercicio en el 56%.
No obstante, Aragón todavía guarda distancia con otras comunidades autónomas como, por ejemplo, la Comunidad Valenciana, que es la que registra la menor protección de las empresas contra impagos con un 46%, estableciéndose una distancia de casi diez puntos con la comunidad aragonesa.